El estrés es aquella situación, laboral o no, que el sujeto interpreta como “complicada” y que desencadena un cambio en nuestro cuerpo, a nivel fisiológico, y en nuestra mente (emociones, pensamientos…) para afrontarla.
¿Qué situaciones generan estrés laboral?
Cuando una situación laboral es difícil, nueva, impredecible o desconocida se supone estresante. En estos casos el trabajador se puede sentir incapaz de resolver los problemas que se le exigen solucionar, ya sea por falta de conocimientos, de recursos materiales, de tiempo o de habilidades .
El estrés provoca una respuesta y no siempre tiene por qué ser perjudicial . Si la situación no es especialmente intensa y no se prolonga demasiado en el tiempo, los cambios fisiológicos que provoca permiten que nos adaptemos a la nueva situación. Por ejemplo, ser testigo de un accidente de tráfico genera un estrés que resulta en cambios corporales (secreción de adrenalina) que permiten actuar con mayor celeridad para atender a las víctimas o ir en busca de ayuda.
Otras veces, la situación estresante es percibida como tan difícil o tan duradera, que genera problemas emocionales como ansiedad o depresión . El sujeto experimenta indefensión, desesperanza, e incluso los cambios fisiológicos que deberían permitir adaptarse y tomar decisiones importantes o actuar adecuadamente, empiezan a repercutir sobre nuestra salud.
¿Cuáles son los cambios corporales y mentales que se generan en reacción al estrés, y qué consecuencias pueden tener?
Cambios fisiológicos:
-Aceleración del pulso, aumento de la tensión arterial que puede desencadenar arritmias
-Aceleración de la respiración que puede generar hiperventilación
-Temblor y tensión muscular que puede empeorar contracturas
-Sudoración
-Boca seca
-Diarrea
-Aumento de los niveles de azúcar en sangre y del colesterol o triglicéridos
-Mayor secreción de jugo gástrico que puede generar sensación de ardor
-Incompetencia inmunitaria, que podría resultar en infecciones o cáncer
-Menor función de las glándulas sexuales, que podría suponer infertilidad temporal
-Degeneración renal
-Involución pancreática y del hígado
Aquí se incluye el contenido principal de la entrada. Para editar este texto, haga clic en éste, elimínelo y empiece a teclear el suyo (o cópielo desde otra fuente).Cambios psicológicos:
-Emocionales:
oMiedo, ansiedad (pánico), sensación de indefensión, ante el estrés agudo
oIrritabilidad, ira, depresión, ante el estrés crónico
-Cognitivos: preocupación excesiva, sensación de pérdida de control, pérdidas de memoria, bloqueo mental…
¿Cómo responden los trabajadores al estrés?
El estrés provoca en el trabajador una respuesta que busca adaptarse a la nueva situación, solucionar los problemas, o simplemente desconectar de ellos, para mejorar sus síntomas. Estas respuestas pueden ser incluso perjudiciales para el trabajador.
1.Conducta adaptativa : A veces el ser humano busca emociones gratificantes que contrarrestan a las desagradables, y lo hace a través de la comida, el sueño, las relaciones sexuales, el ejercicio, el tabaco, etc. Puede resultar se una conducta “adaptativa pero inadecuada o perjudicial” como en el caso del tabaco o el exceso de ingesta, por ejemplo.
2. Lucha : con esta conducta se intenta buscar soluciones a los problemas , pero no siempre se toman las decisiones más adecuadas. A veces la lucha se orienta, no contra el problema en sí sino contra personas (compañeros, jefes) a los que el trabajador supone amenazantes.
3. Inhibición conductual: “ desconectarse del entorno” es la estrategia de algunas personas para disminuir el estrés. Suelen tener desesperanza en encontrar una solución a los problemas.
¿Con qué recursos se puede afrontar el estrés laboral?
Es evidente que uno de los deberes de una empresa hacia sus trabajadores, es evitar que se produzcan situaciones estresantes .
Lo primero será realizar una buena prevención . Una de las causas más frecuentes de estrés laboral son las situaciones nuevas y desconocidas para el trabajador ante las cuales no sabe como responder por falta de conocimientos o recursos. Por eso la correcta formación (teórica pero también práctica) y el apoyo de los compañeros más experimentados contribuyen a prevenir el estrés.
La empresa también ha de ser conocedora de qué exigencias laborales son razonables y cuáles sobrepasan los límites de las capacidades de un trabajador para evitarlas.
El trabajador puede detectar situaciones estresantes y buscar soluciones mediante diferentes técnicas. La evaluación de estas situaciones estresantes ponen en conocimiento al propio trabajador sobre cómo responde a las situaciones estresantes, para luego buscar la forma de adquirir nuevas habilidades para que las mismas situaciones no sean tan estresantes cuando se repitan en el futuro. Para evaluar la situación estresante se puede utilizar:
1.La reconstrucción imaginaria : el trabajador reconstruye la escena para examinar las oportunidades de mejora.
2.Los autorregistros : el trabajador registra sus experiencias para buscar soluciones a pequeños problemas antes de que aumenten su repercusión y se sienta demasiado abrumado para actuar.
3. Evaluación conductual : es una tercera persona la que evalúa las actuaciones del trabajador para detectar déficits i corregirlos, como por ejemplo una falta de formación en un área determinada del trabajo.
Conclusión
El estrés laboral nace en muchas ocasiones de la incertidumbre y lo “nuevo o desconocido” para lo que el trabajador se siente incapaz o poco preparado.
Anticiparse a las situaciones estresantes, prevenirlas y, en los casos en las que ya estén presentes, detectarlas , es fundamental para actuar y así evitar las consecuencias negativas que tiene el estrés laboral sobre la salud física y mental (en definitiva, el bienestar ) del trabajador.
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