Causas del dolor de espalda

Dra.Eugenia Fdez-Goula Pfaff • 19 de noviembre de 2018

Una causa frecuente de visita al médico: el dolor de espalda

Casi todos tenemos en algún momento problemas de espalda y de cuello, el dolor de espalda es una causa frecuente de consulta al médico.

La espalda soporta al cuerpo, protege la medula espinal conducto por el que los nervios periféricos se comunican con el cerebro en ambas direcciones.

La columna vertebral no es un hueso sino muchos, ni es una columna pues presenta curvaturas hacia dentro tanto a nivel del cuello como en la parte baja de la espalda y hacia fuera en la parte alta de la espalda y en la pelvis.

Esta formad por vertebras separadas por discos y que protegen a la medula espinal que va desde la base del cerebro hasta la parte más baja de la espalda. Músculos que son como bandas elásticas de arriba abajo y soportan la columna.

Con la edad la columna se va volviendo rígida y pierde flexibilidad, los discos se gastan, los espacios entre vertebras se estrechan, las vértebras en ocasiones desarrollan espolones que pueden producir dolor, se gasta el cartílago que amortigua las articulaciones y los huesos pueden rozar produciendo dolor. Pero el envejecimiento en sí mismo no implica dolor si nos cuidamos un poco. Sin embargo a menudo es difícil señalar la causa del dolor dada la complejidad de la espalda.

La parte baja de la espalda es la que soporta mayor peso por lo tanto es la que suele doler con mayor frecuencia aunque una lesión puede ocurrir en cualquier parte de la espalda.

Las causas más frecuente de dolor de espalda y cuello son por:

-Levantar objetos de forma inadecuada

-Un esfuerzo físico de forma repentina y extenuante, accidentes, lesiones por caídas en los deportes

-Falta de tono muscular

-Exceso de peso, especialmente alrededor de la cintura.

-La posición al dormir, sobre todo si se duerme boca abajo.

-Sentarse en una posición fija largo rato o por una mala postura al sentarse u acostarse.

-Utilizar almohadas inadecuadas forzando el cuello.

-Sostener el teléfono con el hombro.

-Levar cargas pesadas en un hombro o en la espalda.

-Mantener una posición inclinada hacia delante por largo tiempo.

- La tensión y el estrés diarios.

-Debido a la relajación muscular y de ligamentos que se produce en el embarazo.

El dolor muscular puede presentarse enseguida después de lesionarse, o pasar varias horas antes de sentirse dolorido. Un musculo lesionado suele contraerse sin control, sufrir un espasmo muscular. Cuando esto acurre hay que disminuir la actividad para no generar una lesión mayor. Un espasmo muscular importante suele durar de 48 a 72 horas seguido de unos días o semanas de dolor intenso. El uso exagerado del musculo lesionado las siguientes 3-6 semanas tras la lesión puede ocasionar que esta reaparezca. Por suerte la mayoría de los dolores de espalda desaparecen a las 6 semanas.

Con el paso de los años el tono y la fuerza muscular disminuyen, con lo que no convertimos en más propensos a las lesiones. Mantener la flexibilidad, la fuerza y conservar los músculos abdominales fuertes es lo mejor que se puede hacer para prevenir los dolores de espalda, para ello son suficientes 15 minutos diarios haciendo ejercicios suaves de estiramiento y fortalecimiento.

La curación del dolor de espalda suele ser rápida si se puede continuar con l actividad habitual de forma ligera, evitando el motivo del dolor. Se recomienda evitar los periodos largos de reposo en cama que suelen agravar el dolor y debilitar a la persona.

Para aliviar el dolor de espalda Se recomienda la utilización de compresas frías inicialmente para evitar el dolor, durante 15 minutos, unas cuatro veces al día, recordando no colocar nunca el hielo directamente sobre la piel, pues podría causar lesiones.

Acostado boca arriba, doblando las caderas y las rodillas con las piernas elevadas puede encontrarse alivio. Hay que evitar la actividad que causó la distensión. Se tiene que descansar pero evitando los reposos prolongados en cama, más de un día o dos que pueden ocasionar que la recuperación sea más lenta.

Pasadas 48h desde la lesión se pueden aplicar calor local con la intención de conseguir relajar los músculos doloridos.

Inicio progresivo de los ejercicios ligeros de estiramientos, evitando sacudidas y saltos, así como cualquier movimiento que aumente el dolor o que requiera esfuerzo.

Los analgésicos a veces pueden estar indicados.

Los masajes pueden resultar adecuados sobretodo en caso de contractura muscular, pero evitando aplicarlos directamente sobre la columna.

En ocasiones se puede recomendar el uso de faja o corsé, si se tiene que estar mucho rato parado o sentado, pueden aliviar el dolor pero hay que recordar que no se puede abusar de su uso por largo tiempo pues interesa que los músculos se ejerciten cuanto antes.

Como decimos el dolor de espalda es muy frecuente, la causa más común es la contractura muscular y suele aliviarse pasadas unas semanas


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